ANIMAL DE RIO

“La violencia es un animal incontrolable, que suele terminar atacando a su propio amo” Renny Yagosesky

Animal de Río

De Guadalupe Fernández Peña

La violencia doméstica, es un grave problema social por su efecto devastador sobre la vida familiar y la impotencia, es uno de los estados anímicos producto de los maltratos que paraliza a la mujer dejándola en un enorme estado de indefensión. Para poder revertir esto, es necesario romper el silencio y pedir ayuda. Pero, qué pasa si esto no sucede? ¿Si le es imposible a esa victima decir lo que le está pasando? Se puede llegar a una línea muy finita entre el impulso y la razón y si se pasa para el lado de la locura se corre el riesgo de vivenciar lo peor…

En éste momento clave están una madre y su hija; ellas, están en la orilla del arroyo intentando pasar desapercibidas e imaginando un futuro más próspero para ambas. De éste modo, Inés (Camila Cahn) y Matilde (María Lía Bagnoli), están tratando de sobre llevar la pesada y trágica carga que las acompaña, y, a la vez, intentan disfrutar el alivio tan esperado inconscientemente por ellas. Inés, mas entera y con fortaleza, trata de mantener la calma, en cambio, Matilde, abrumada, destruida, con una satisfacción enmascarada por el dolor no puede dominar sus estados de ánimo y sufre…sufre por ella… por su hija…por su vida. Súbitamente, aparece en escena el hermano del marido de Matilde (Sergio Zanardi) exigiendo respuestas, que no se pueden dar haciendo que lo oculto no desaparezca…

Animal de Río, es el grito ahogado de una angustia enquistada en el alma, espanto de dos mujeres que luchan por salvarse a cuesta de todo y de todos. El argumento escrito por Guadalupe Fernández Peña, nos explica el fondo del tema principal por medio de palabras, de gestos, de expresiones, y sobre todo de los silencios, así sentimos como el daño que les hicieron brota sin parar, dejándonos perplejos.

Actrices con mucho carácter interpretan esta obra. Camila Cahn, interpretando a Inés, nos enfrenta con sus soliloquios cargados de emoción por el abuso de su padre. Poder conjugar la solides y la sensibilidad, es una virtud que marcamos en Camila. Gran actuación. A su vez, a María Lía Bagnoli, personificando a Matilde, se la ve cabizbaja, escondiéndose, acurrucándose en su pequeño mundo, harta, dejándonos esa pena que la habita y que se arraiga en nosotros. Cuando la vemos, vemos la lucha de la debilidad y una fuerza tan honda como imperceptible a simple vista. En su labor actoral, Maria Lia, se entrega en cuerpo y alma. Sergio Zanardi, tiene un papel muy importante que lo realiza con precisión.

En relación a la puesta en escena, podemos decir que Espacio Polonia es el lugar ideal para representarla. La estructura del lugar permite, primeramente, una visión concreta de la escenografía principal y luego pone a prueba nuestra percepción al utilizar un sitio que no está visible pero que esta tan bien trabajado que parece que lo estuviéramos viendo. Hay mucha creatividad.

La iluminación, la música, los sonidos externos, el vestuario, completan esta producción teatral que nos deja absortos por el tema que trata, esperanzados por seguir viendo estas propuestas en escena y encantados por actores tan implicados. Para verlo, conmoverse y salir fortalecidos.

MUY RECOMENDADA!

Redactora: Estela Gómez

17/04/2022

FICHA TÉCNICA

Dramaturgia: Guadalupe Fernández Peña

Actúan: María Lía Bagnoli, Camila Cahn, Sergio Zanardi

Escenografía: Laura Cardoso

Iluminación: Pablo Calmet

Música original: Ine Güemes, Juan Nazar

Técnico De Sonido: Anali Maguet

Fotografía: Juan Emilio Veliz

Director Repositor: Francisco Cottet