ENRIQUE

“Conozco de tu amargo sufrimiento/ y comprendo lo que cuesta ser feliz:/ Y al son de cada tango te presiento/ con tu talento enorme y tu nariz/...” Homero Manzi

Enrique

De Luis Longhi

El famoso Discepolín nació en 1901 bajo el nombre Enrique Santos Discépolo en el barrio de Balvanera. Para muchos, Armando, su hermano mayor, fue el que influencio en su vocación como poeta; pronto, se convirtió en uno de los más grandes poetas en el mundo del tango. Se destacó en su particular estilo, en donde sobresalieron sus percepciones y sus pasiones, consiguiendo reproducir nuestra idiosincrasia en la canción ciudadana.

Por esto, ver una obra de teatro en donde cuenta un recorte del último dia de su vida (antes de la Navidad del año 1951) nos llena de estremecimiento, de añoranza y de ensueño. Justamente esto es lo que nos deja la obra “Enrique” de Luis Longhi (bandoneonista, actor y autor de textos teatrales y letras de tango). Luís, además de ser el autor, se entregó por completo y se puso en la piel, en el alma y en la mente de ese maestro contándonos sus éxitos, sus fracasos y las situaciones que lo asfixiaron, en un llamado desesperado de afecto final. Longhi, posee una fuerte presencia escénica. Excelente interpretación.

Nos relata que en su camarín, se hace presente un joven de veinte años, asistente del lugar donde tiene que presentar Enrique su último show, convirtiéndose en el “testigo válido” de su soledad, en su “otro” necesario para sentirse vivo. Nicolás Cucaro, caracteriza a éste joven y lo hace con una dedicación única. Sus expresiones faciales, sus posturas corporales, nos dan cuenta de su admiración al gran poeta y, a la vez, de los desconciertos que le provocan alguna de sus actitudes y sus dichos. Gran trabajo.

Y, como corolario de éste momento, aparecen sus fantasmas, el de su hermano y el de su mujer, que lo rondan y a los que él no quiere dejar ir. En el rol de ellos está, Eleonora Dafcik (actriz, titiritera, docente, directora), quien nos invade con sus misterios bajo esas máscaras oníricas. Han realizado una muy buena labor en la elaboración y el diseño de las máscaras logrando una estética ideal.

A ésta comedia (grotesco) musical la dirige Rubén Pires (dramaturgo, actor y docente), cuya capacidad para poner en escena al espíritu discepoliano, ha sido absoluta; al igual que la de todo el equipo que los secundan, todos enormes profesionales que han brindado sus saberes a esta joya del espectáculo porteño.

ALTAMENTE RECOMENDADA!

VAYAN PREPARADOS PARA SOÑAR…

Redactora: Estela Gómez

08/04/2018

Ficha técnico artística:

Autoría: Luis Longhi

Actúan: Nicolás Cucaro, Eleonora Dafcik, Luis Longhi

Objetos: Alejandra Farley, Kati Raggi

Máscaras: Analía Arcas

Pelucas: Myriam Manelli

Maquillaje: Analía Arcas

Diseño de vestuario: Rubén Pires