Lo que está delante de nosotros y lo que está detrás es poco importante comparado con lo que reside en nuestro interior. Oliver Wendell Holmes
“La medalla de oro”
De Luis Agustoni
¿El hombre es un ser superior? ¿Es un ser que tiene la inteligencia y las habilidades para lograr casi todo lo que desee, pero que está indudablemente determinado por su entorno, por su conciencia y por la política? Las respuestas las podemos obtener después de ver “La medalla de oro” de Luis Agustoni, una obra dramática con una realidad candente como son las relaciones dentro de la familia y del ámbito laboral, más precisamente del presidencial.
Nos situamos en un futuro imaginario donde nos aprestamos a conocer una parte de la vida del presidente de una Nación (Luis Agustoni), y lo hacemos a través de sus vínculos y de su manera de pensar y desenvolverse en esa labor tan especial e importante. Primeramente, conocemos a su atenta secretaria (Belén Mazzinghi); luego a su inescrupuloso amigo de la infancia (Ricardo Levy), hoy Ministro; a su rebelde hija (Paula Saenz); a su futuro y frontal yerno (Segundo Pinto). Su secretaria nos adentra en el tema y es el nexo para que los personajes se vayan presentando, los que, ante sus diálogos con el mandatario nos hacen interiorizarnos de un sinfín de disputas que ponen en evidencia los intereses, los anhelos, los desencantos, las confrontaciones, los errores y los aciertos de alguien que es un hombre común y a la vez responsable político de la administración general de un país.
Su autor (también gran actor), Luis Agustoni, no escatimo ni palabras ni sentimientos al hacer explicito lo implícito que habita dentro de todos estos seres, así como su perceptivo director Santiago Rapela que supo captar el mensaje del gran mentor logrando un óptimo trabajo en conjunto. A la par, Ricardo Levy, Belén Mazzinghi, Segundo Pinto, Paula Saenz, le agregan el matiz actoral necesario para que la puesta sea muy buena manteniendo ese estilo locuaz con oraciones correctamente armadas, que son el sello indiscutible del dramaturgo. Una obra con la estructura armada de tal manera que abarca perfectamente todas las tramas ocultas que subyacen permitiéndole una imbricación continua de las mismos. Vestuario y escenografía (Nadia Casaux) clásica, con muy buen diseño y estética.
Altamente recomendable, porque la obra si bien nos habilita para entender cómo se mueve en parte el “status quo” dominante, lo que sobresale es la inmensa humanidad que tiene. Las cuestiones que trata, independientemente de la profesión que se presenta, nos moviliza y nos lleva a la reflexión ya sea por los clásicos conflictos entre padres e hijos, como por los inesperados actos de corrupción de alguien muy allegado, e, inclusive por los profundos debates que pueden ocurrir en donde la sinceridad de un extraño refuta lo ya decretado. De todo hay un gran aprendizaje.
Relevante, aguda y realista. Con actuaciones que están en un muy buen nivel y con la marca registrada del maestro Agustoni.
¡PARA NO PERDÉRSELA!
Redactora: Estela Gómez
03/11/2017
Ficha técnico artística
Autoría: Luis Agustoni
Actúan: Luis Agustoni, Ricardo Levy, Belén Mazzinghi, Segundo Pinto, Paula Saenz
Vestuario: Nadia Casaux
Escenografía: Nadia Casaux
Iluminación: Diego Gómez Leite
Fotografía: Santiago Rapela
Prensa: Silvina Pizarro
Producción ejecutiva: Ana Caterina Cora, Diego Gómez Leite
Producción general: Teatro El Ojo
Jefe de escenario: Diego Gómez Leite
Dirección: Santiago Rapela
Web: http://www.luisagustoni.com.ar
TEATRO EL OJO
Tte. Gral Juan Domingo Perón 2115
Capital Federal - Buenos Aires - Argentina
Teléfonos: 4953-1181
Web: http://www.luisagustoni.blogspot.com
Viernes - 20:30 hs
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