NERIUM PARK
De Josep María Miró
"La vida en los barrios cerrados exacerba las desigualdades sociales; la muralla no es un dato menor ni para los de adentro ni para los de afuera"
Cecilia Arizaga
Y llegó la mudanza, ya están instalados en su nuevo hogar, felices, así se muestra esta pareja que llevan nueve años juntos. Fue un proyecto, lo llevaron a cabo y se les dio, si bien él o sea Nacho (Claudio Tolcachir) da a entender que era un deseo de Victoria (Paula Ransenberg), ambos están dónde quieren estar, fuera de la ciudad, con otra vista, con un aura diferente, una comodidad inigualable, un lugar exclusivo NERIUM un barrio privado. Parecen ser unos de los primeros habitantes de este complejo, pero eso no importa, solo alcanza con ellos y su amor, la muy buena vida por la que están pasando, y…hasta sueñan con la posibilidad de agradar la familia.
Pero, lo bueno dura poco, esta intimidad y tranquilidad que buscaban, se torna tediosa y preocupante, hasta parecen ya resistirse a adaptarse al medio. Apenas unas semanas después, todos los planes tienen un dudoso futuro.
Se hace presente una extraña aparición que merodea el country. Nacho ha sido despedido de su trabajo. El pánico se apodera de Victoria. Todo se transforma en climas sugestivos, confusos, opresivos, agobiantes, grises de inseguridad. Todo parecer ser, pero no lo es. Torzadas interrupciones atentan contra sus personalidades, envueltos en situaciones límites hacen que luchen, no siempre con éxito. Estas y muchas más razones serán las que pondrán contra las cuerdas a esta pareja.
Es poco frecuente que un thriller emocional forme parte del género del teatro, más aún con el magnetismo que emite esta historia, de esas que no te sueltan, de las que captan la atención de principio a fin. Evidentemente su autor lo vio claro, y su directora supo leer muy bien su intención.
En cuanto a las interpretaciones, una pareja con mucha conexión, sus miradas realmente se encontraban sobre el escenario, me gustó la fluidez que surgió entre ellos, y fue tomando más fuerza sus estados anímicos a medida que el suspenso se apoderaba de cada escena. Vi entrega y pasión de artistas, sin lugar a duda.
Es la primera vez que veo en este rol a Claudio Tolcachir, sé que es una genialidad como dramaturgo y/o director, pero ahora le sumo un rasgo más, muy buena interpretación. De quien no esperaba menos es de la histriónica Paula Ransenberg, cautivante, siempre en cada papel esparce su talento, su versatilidad, su entrenamiento la lleva a incorporar herramientas esenciales para desarrollar hipótesis propias de su actuación. Un trabajo exquisito.
La dirección a cargo de Corina Fiorillo, brillante muestra de experiencia y perfeccionamiento, se notó que hay equipo de trabajo. Una mirada acertadísima en la dupla actoral, una puesta en escena que supo conjugar elementos para crear un estilo propio y único, una atmósfera poderosa, compuesta por doce situaciones que no se repiten pero se integran a la identificación de la trama. La sensibilidad es otro de los elementos de unión.
Un muy buen trabajo de luces, acompaña a la perfección la profundización interior del desenlace. Aquí radica la astucia de su directora, que estuvo en todos los detalles; una pieza de a ratos divertida, cargada de intriga y con un final perturbador.
¡¡¡ALTAMENTE RECOMENDADA!!!
Redactora: Silvina Brandana
Ficha técnico artístico
Autoría: Josep María Miró
Dirección: Corina Fiorillo
Actúan: Paula Ransenberg, Claudio Tolcachir
Escenografía y Vestuario: Gonzálo Córdoba Estévez
Diseño de luces: Ricardo Sica
Realización de escenografía: Alberto Chuquichaico
Realización de utilería: Carolina Scarinci
Video: Nicolás Pol
Fotografía: Fabián Pol
Asistencia de dirección: María García De Oteyza
Prensa: Carolina Alfonso
Producción: Maxime Seugé, Jonathan Zak
TIMBRE 4
México 3554 (CABA)
Teléfonos: 4932-4395
- Jueves - 17:00 hs - Hasta el 28/07/16 y Del 02/10/2016 al 20/11/2016
- Domingo - 19:15 hs - Hasta el 31/07/16 y Del 02/10/2016 al 20/11/2016
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