ESA MALA MUJER

El grupo “Sin Red” presenta: 

ESA MALA MUJER

De Marcelo Silguero

La cólera no nos permite saber lo que hacemos y menos aun lo que decimos.

El destino mezcla las cartas, y nosotros las jugamos.

Arthur Schopenhauer

Sobre el cielo del infierno: un relato que propone reflexionar sobre las causas y consecuencias de la Violencia de género, violencia social y familiar. Una mujer Aurora (JENNY LUCIUK), pieza clave de la construcción de una vida muy difícil, complicada, tanto en el pasado como en el presente, una lucha contra la adversidad de ser madre, que ha destrozado su estado vivido real y está en conflicto con ella y con los que la rodean, llegando a fenómenos intrapsíquicos.

Su pasado la condena, recordar sólo le trae disgustos y fracasos, siendo una prisionera de tristezas, traiciones y temores, quedó sumergida en el túnel de sus recuerdos, del pesimismo, llevándola a una vida que cambiará totalmente por cruzar los límites, el horror de cometer un crimen. Estuvo 10 años presa, pagando por su error, por su culpa, y tuvo su redención por buena conducta.

Regresa a su humilde hogar junto a su familia, en medio de un entorno agresivo, los recuerdos son fuentes de sufrimiento para ella, situaciones dolorosas que parecen una tortura, la locura, el alcohol, la depresión por la pérdida de su hija al nacer, una red de relaciones vinculares disfuncionales que viene de generación en generación, hechos de trascendencia como el abandono de su madre, que marcó su vida con un estado de ira, angustia y frustración, la falta de afecto y un hecho deplorable, dejará a Aurora con problemas emocionales.   

Una herida abierta en el alma, reactiva al pasado, impidiendo vivir un presente, sólo hay una razón que la pueda ayudar a proyectar un futuro, sólo una oportunidad para salir del pozo, llenar su vacío de soledad en compañía de un ser amado.

Una obra realista, moderna y conmovedora, tiene una puesta con mucha decisión y convicción, pero decae un poco cuando las sospechas de la trama se ponen en evidencia casi inmediatamente que comienza la acción, las intuiciones se resuelven rápido, y por momentos su misterio entra en un desequilibrio, contradicciones con la lógica que venía trayendo la pieza teatral, me gustaría no dejar espacio para las conjeturas y dudas, ya que es muy interesante la problemática social y actual que viven estos sujetos.

Un final positivo e intenso, dentro del caos de una vida que parecía perdida, reanuda una esperanza a través de un reencuentro.  

La actriz central Jenny Luciuk me gusta su personalidad sobre el escenario, desafiante, requiere de concentración su papel, mucho texto, admirable su memoria, le impone realidad a su personaje, la expresión de sus afectos, el clima de desconfianza, sus ataques de ansiedad, muy buen desempeño, muy bien defendido su protagónico.

Me gustó en general, pero traté de encontrar más afinidad con el elenco y sus actuaciones, pero no fueron todos tan convincentes, salvo el papel de Betty (Carolina López), me gustó y convenció su búsqueda en su rol, se le puede exigir más, por su juventud, pero crea y propicia muy buenos momentos, en especial los climas íntimos con su identidad. La pasión se impone como inspiración y eso habla de un buen futuro para esta actriz.

Escenografía sencilla, pero lucida, mostrando un universo que tiene que ver con el contexto de la historia, y que no es ajeno a los ojos de la realidad, una casa humilde dentro de una villa.

El vestuario apropiado para cada personaje.   

Recomendable por abordar las problemáticas sociales con grados diversos de formación que tienen que ver con la crianza familiar, el contexto de pobreza, la prostitución, la justicia y la asistencia social, y la especificidad de los actores que participan en el cómo de los problemas que allí se plantean.