BABILONIA
De Armando Discépolo
Uno de los dramaturgos más influyentes durante los finales de la etapa "clásica" del teatro argentino, Armando Discépolo.
Babilonia (1925, aproximadamente) llama la atención desde el principio por su curioso nombre, que será explicado en la obra durante un dialogo del personaje "Piccione".
A pesar de que la obra es catalogada como un "Grotesco Criollo", es en realidad una amalgama de distintos géneros teatrales desarrollados por su autor.
Se retrata el ambiente del sótano de una casa de "inmigrantes ricos", en Buenos Aires, donde los criados conviven en un ambiente cargado de violencia y falta de comunicación. En efecto, al hablar los personajes extranjeros el español como mejor pueden, no logran entenderse, y esto da lugar a la confusión y a los mal entendidos. Es por eso mismo que la obra se llama Babilonia, retratando el hecho bíblico conocido como "La Torre de Babel" interpretado como "la mansión de lo alto entre el cielo y la tierra".
La trama de la obra sigue su curso por medio de distintas "intrigas", cuya función es retratar los problemas sociales de la casa en donde transcurre el drama, y por eso muchas de ellas quedan en la nada. Por ejemplo, la misteriosa relación entre Emma – PAMELA MARQUEZ, la hija de los dueños de la casa con Otto – FRANCO MASSA, el conductor de origen alemán, o la opinión de Víctor – DIEGO IÑIGUEZ, el hijo de los dueños, sobre el casamiento de su hermana, y su discusión con su madre, Emilia – MARIANA TEDESCO sobre ello. Uno nunca llega a saber en qué desenlazan dichas tramas, pero sí se mantiene la impresión que provocan (la de decadencia moral y social.)
La intriga principal es la de José – LEANDRO DÍAZ, un mucamo gallego, que debido a una enfermedad ocular (conjuntivitis) tiene que dejar de trabajar y buscar un remplazo, Alcibíades – FERNANDO VALLEJOS. Por desgracia para él, Alcibíades es un poco desastroso como criado, y ve como Eustaquio – MARTÍN ALBISTRO, otro mucamo amenaza con destruir todos los años en los que trabajó en la casa. Para hacerlo quedar mal, José intenta robar el collar, que es regalo de bodas de la hija de la casa, y esconderlo en su traje, pero no todo sale como él quiere.
Lola – MARÍA SOLEDAD COTELO, la esposa de José, se la pasa advirtiéndolo de que no es una buena idea, pero él no la escucha.
Piccione – HUGO ZUGUEB, es, fuera de todo el conflicto principal, el personaje más interesante de la historia. Un chef italiano, que por momentos cree que esta en un nivel más alto que los demás criados, hasta que Esteban (dueño de la casa) le aclara que esto no es así, que allá abajo son todos iguales. Junto a él, esta Cacerola – MANUEL ROBELLO, un pinche de cocina, también italiano, y Carlota – ANABELLA ORSI, que es francesa. Estos dos personajes contribuyen a la trama sólo con situaciones graciosas, y para criticar ciertas costumbres. Secundino-portero gallego- IGNACIO PASSARELLI, Isabel – MARÍA BELÉN GONZÁLEZ, China – MAGALÍ ROSSI (ambas mucamas) son personajes accidentales, que sirven para profundizar un poco a la trama y la crítica social que se hace.
Una presentación de la realidad histórica que permite observar los hechos de una manera dolorosa. Pero el fin de la obra vale la pena, la continua aparición de subtramas, van haciendo la cosa más interesante, aunque por momentos como crítica constructiva se me hizo un poco extensa la obra, dilatándose mucho el eje central de la dramaturgia, y eso produce un poco de impaciencia y baja el impulso del misterio.
Destaco el producto final, la reelaboración en materia teatral de su directora LAURA SARDIN, el proceso creativo, esta realidad así constituida llevarla a un espacio escénico, muy buen desempeño; además de saber trabajar en equipo y manejar la cantidad de actores en escena, seguramente con una creación colectiva, pero muy loable el hacerlos todos visibles, siguiendo un orden y una consecuencia. Muy Bien logrado.
Con respecto a los actores y actrices que son 14 sobre el escenario, muy buen elenco, interesantes actuaciones, muy comprometidas, lineal todos con fuerte expresividad, precisión, logran divertir, emocionar y hacernos pensar. Muy destacable los múltiples idiomas, el uso lunfardo especie de dialecto, esa relación del criollo y los inmigrantes tratando de comunicarse.
Un especial distinción a la Sra. Emilia – MARIANA TEDESCO y Piccione el chef – HUGO ZUGUEB; brillantes sus roles, estremecía el impacto de su relato, su personalidad, trabajo corporal y gestual. Sensacional llaman la atención dentro del amplio grupo.
Por último y no por esto menos importante, el extraordinario vestuario a cargo de CRISTINA TAVANO, realmente acorde, distinguido, perceptible a la cualidad de cada personaje.
Al igual que la escenografía, en especial la utilería, muy bien seleccionada, enaltece la puesta en escena. Luces y sonido acompañó la propuesta.
Calificación: Muy muy Buena!
Redactora: Silvina Brandana
Ficha técnico artístico
Actúan:
Martín Albistro, María Cotelo, Leandro Jorge Díaz Caparrós, Belén González, Diego Iñiguez, Pamela Marina Marquez Lo Menzo, Franco Massa, Anabella Orsi, Ignacio Passarelli, Manuel Robello, Magalí Solange Rossi, Mariana Tedesco, fernando vallejos, Hugo Zugueb
Vestuario: Cristina Tavano
Escenografía: Laura Sardin
Iluminación: Laura Sardin
Música original: Marcelo Ferreyra
Asistencia de dirección: Diego Iñiguez
Dirección: Laura Sardin
MANZANA DE LAS LUCES
Perú 272 CABA
Sala SIRIPO
Teléfonos: 4342-6973 / 9930
Web: http://www.manzanadelasluces.org.ar
Entrada: $ 80,00 / $ 60,00 - Sábado - 21:00 hs –
Hasta el 29/11/2014
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Maria ana garcia (viernes, 13 abril 2018 09:27)
Deseo la obra BaBilonia completa
Queti porta (domingo, 27 mayo 2018 13:58)
Por la puerta
Quetin Porta (domingo, 27 mayo 2018 14:01)
Porel portón o puerta �
Nestor (miércoles, 27 noviembre 2019 18:56)
Una pregunta,dónde está el diálogo de piccione explicando el nombre?