18. septiembre 2014

TE LLEVO EN MI SANGRE

Te llevo en mi sangre

Carlos Miceli

“Hay que escuchar a la cabeza, pero dejar hablar al corazón”. Marguerite Yourcenar

“Te llevo en mi sangre” es una historia con una trama tan simple como compleja. Es simple porque habla del amor, de todo tipo de amor, el amor de los amigos, el de los hijos, el de una pareja, el buen amor, el mal amor, el desamor, el amor después del amor y es a su vez intrincado precisamente por el tema que aborda … ¿hay algo más simple y a su vez más complejo que el amor? Tarde o temprano, en mayor o menor medida todos nos vemos atravesados por este sentimiento y ninguno de nosotros sabe siempre a ciencia cierta que hacer con lo que sentimos.

Hernán (Carlos Miceli), es un viudo maduro que a pesar de resistirse se ha enamorado nuevamente. Gonzalo (Nacho Marino) es quien lo ha flechado, un joven muy bien parecido de la edad de su hija, Soledad, (Eugenia Encina). Hernán se siente desorientado y pide consejo a su amiga Mariné (Pato Chaneton). Logra vencer sus miedos, comienza una relación y la desilusión no tarda en llegar pero no viene sola, viene acompañada de una mala noticia de la mano de una agente de salud (Micaela Dinolfo). Esto pone a prueba nuevamente los lazos afectivos y le muestra a Hernán quien está dispuesto a mantenerse a su lado, sin segregarlo y quien lo ama sinceramente (Ezequiel Fernanz).

El texto de Carlos Miceli puede ser interpretado por una pareja homosexual, como es el caso, o por una pareja heterosexual, nada cambiaría. Solo habla de seres sesgados por un sentimiento con el que cuando uno se tropieza no sabe muy bien como reaccionar. La diferencia de edad, el miedo a salir lastimado, las elecciones, el que dirán, la mirada de la sociedad, la infidelidad y los riesgos de no cuidar al ser amado. Es una dramaturgia plagada de humor, sin golpes bajos y con mensajes muy claros y directos. Si tuviera que definir la obra en una sola palabra posiblemente elegiría “Resiliencia”, la capacidad del ser humano para sobreponerse a una situación adversa y salir fortalecido. Todo esto sucede en el lapso de una hora y tanto donde se matiza texto y canto. Y este último ítem merece una mención especial porque es tan bueno lo que el espectador ve como lo que oye, están tan bien interpretados esos temas, cuya autoría son del mismo Miceli, con música de Agustín Konsol, hay tanto talento y tanta formación que emociona. Cometería un grave omisión si no destacara el virtuosismo de Ezequiel Fernanz, Eugenia Encina y Pilar Miori.

El nivel de actuación es muy bueno y homogéneo. La dirección ha dotado de características muy marcadas a cada personaje. La puesta es muy dinámica, se hace uso absoluto de cada centímetro y cada puerta del espacio disponible. Escenografía y vestuario totalmente acorde a la propuesta. Un trabajo muy preciso de luz y sonido, los ensambles son muchos sin embargo la coordinación es impecable.

Para los espectadores que gustamos del buen teatro musical esta propuesta es mucho más que interesante. Es una idea simple pero elaborada con tanta habilidad y tanto talento que la magnifica. Da mucho gusto conocer a través de estos proyectos a actores con tanto empuje, disposición, entrenamiento y tanto profesionalismo. Claramente “Te llevo en mi sangre” es un musical positivo, como anticipa la gráfica y hay que verlo, disfrutarlo y recomendarlo. ¡Es una propuesta rebozante de ternura, hace bien verla!

Calificación:

¡Altamente Recomendable!

“Según ley 4013 Resolución 5514 Ministerio De Cultura Del G.C.B.A auspicia el proyecto “Te llevo en mi sangre, un musical positivo”

Redactora:

Andrea Alejandra González

Vista el 14/9/2014

Ficha técnico – artística:

Libro: Carlos Miceli

Intérpretes: Pato Chaneton, Micaela Dinolfo, Eugenia Encina, Ezequiel Fernanz, Nacho Marino, Carlos Miceli, Pilar Miori

Vestuario: Estudio Saldivia Spiridone

Maquillaje: Belén Fiorito

Música original: Agustín Konsol