02. mayo 2014

SEÑORAS DE LA GUERRA

“Y es que, en verdad, el hombre prudente debe evitar la guerra”

Casandra

“Señoras de la Guerra”

De Diego Villalba

La tragedia de, Eurípides, Las troyanas, muestra el último día de la destrucción de Troya, con el desconsuelo de las mujeres por la pérdida de sus maridos y la dura realidad que les esperaba después del terrible flagelo de la guerra. En éste punto se detiene el director, Diego Villalba, para la adaptación de éste célebre texto y poner en escena la obra de teatro “Señoras de la Guerra”. Indudablemente, al igual que Eurípides, encuadra su mirada sobre la desdicha de una manera diferente. El dramaturgo y filósofo de Grecia, fue mucho más allá que hablar solo de los dioses, y, el actor, director y profesor de teatro en cuestión, traspasa los límites de la tragedia llegando a la internalización del dolor acompañado por la danza y la música.

El relato nos cuenta cómo reaccionan las esposas de los troyanos muertos en la guerra cuando se van enterando de sus destinos. Hécuba (Silvia Bek), la reina madre, fue recibiendo de parte del heraldo griego Taltibio la desgracia que les tocaba vivir a sus hijas. Entonces, nos enteramos que Casandra (Cintia Trobbiani) va a ser llevada por Apolo hasta Micenas donde le aguarda una muerte horrenda pronosticada por ella misma; que Andrómaca (Julieta Bergunker) va a ser la acompañante del lecho del hijo de Aquiles, el asesino de Héctor, su amado esposo. El dolor de Hécuba llegará a la locura cuando Taltíbio (Ariel Cortina) le informa que se llevara a cabo el hecho más infame, el homicidio de su nieto, de una forma exacerbadamente brutal. El lamento de la abuela ante el cadáver, es extremadamente desgarrador. También está la esposa de Menelao (Diego Villalba), uno de los griegos que se escondieron dentro del caballo de madera, la agraciada Helena (Beatriz Zulic), cuyo rapto causó la desgracia entre griegos y troyanos, y, que se avergonzaba ante su gente por lo ocurrido. Es una tragedia en donde se manifiesta la pérdida de esperanza de vida de las habitantes de la región.

Este hecho teatral, es una expresión llena de sensibilidad interpretada con mucho compromiso por las actrices y los actores que nos brindan todos sus saberes. Se distingue la puesta en escena a cargo de Luciano Torres/Diego Villalba, por la creatividad que se nota al acompañar la presentación del espectáculo y de los personajes con distintos temas musicales. Entre otros, preciamos en la apertura el sonido de Snakefood de Safri Duo, también presentando a Hécuba y al cierre, la canción Journey of the Angels, de Enya. Del mismo modo, todos los solos y los dúos elegidos son muy propicios para disfrutarlos. Un vestuario delicado, junto a un suave maquillaje nos da una sutil estética que favorece, gracias a Miguel Morán.

Podemos decir que en éste drama, nada es estático, que dentro de lo clásico, se pudo transformar para recrear conservando lo tradicional.

Una apuesta interesante.

Redactora: Estela Gómez

Ficha técnico-artística

Actúan: Silvia Bek, Julieta Bergunker, Ariel Cortina, Cintia Trobbiani, Diego Villalba, Beatriz Zulic

Vestuario: Miguel Morán

Maquillaje: Miguel Morán

Diseño de máscaras: Susana Zilbervarg

Fotografía: Tatiana Margulis

Diseño gráfico: Sean Mac Allister

Prensa: Laura Castillo

Coreografía: Aldana Tesone