LA PUERTA ABIERTA

LA PUERTA ABIERTA

De Víctor H. Mazzeo  

“Aquí estoy para vivir mientras el alma me suene, y aquí estoy para morir, cuando la hora me llegue, en los veneros del pueblo desde ahora y desde siempre. Varios tragos es la vida y un solo trago es la muerte”

Miguel Hernández

Argentina, Buenos Aires aproximadamente 2011, en un barrio porteño de la ciudad.

La pieza de una casa antigua o viejo conventillo. Es un lugar cálido, con pocos muebles. Un ventanal, una lámpara, un sofá, una pequeña mesa y elementos de un artista plástico, en este caso el arte del pincel, el pintor Aldo (JUAN ALUNNI) es quien vive ahí, aparentemente comparte la pieza con Dulce (MARU RINDONE), una bella jovencita que vende su cuerpo por dinero.

Es el final de la tarde de un día lluvioso, pero de intensa lluvia, los relámpagos dan cuenta de ello.  

El escenario está en penumbras.

Se escucha un golpe en la puerta, una visita inesperada, una mujer, hace su aparición Cata (IRENE SABIA) parecen no conocerse, él cree que se trata de otra futura alumna en busca de sus clases, pero no, ella se sienta, se para, va de un lado al otro. Está nerviosa y emocionada, sus movimientos son lentos y controlados. Dice ser una periodista en búsqueda de una nota.

Cuando hablan, es como si hablaran consigo mismos. Al principio manteniendo la distancia de dos personas que no se conocen; a medida que el tiempo avanza entran en confianza.

La memoria es la base de la personalidad individual, vivimos en y por el recuerdo, y nuestra vida está asentada en ella, aunque allá momentos que quisiéramos borrar; Aldo y Cata tienen una persona en común que formó parte de su vida, marcando a fuego su ausencia, para él su gran amor, para ella su hermana, la misma fue víctima de secuestro, detenida-desaparecida en el último golpe de estado de la dictadura militar en 1976. Se desconoce su paradero, pero no su descendencia, una hija nacida en cautiverio, hoy tiene 35 años, quien tiene deseo de conocer a su padre, y es a través de su tía que le hace llegar su mensaje.

Esto significará una recopilación de datos y recuerdos muy grandes, lleno de detalles, que llevaran a una confesión terrible por parte de Cata, que podrán explicar la causa de la desgraciada desaparición de su hermana.

Una persona real y concreta, traerá no sólo la memoria, sino unas cuantas guías que el corazón humano tiene para andar sus pasos: la verdad, la vergüenza, la consecuencia, la honestidad, el respeto a uno mismo y al otro, y en especial el Amor.

Por eso dicen, la memoria apunta siempre al mañana y esa paradoja es la que permite que en ese mañana no se repitan las pesadillas, una poderosa vacuna contra la muerte y alimento indispensable para la vida.   

El teatro es un vínculo con el mundo exterior, situaciones que pasan en la vida real son vistas a través de la escena, traídas por buenos actores como es este el caso, que hacen un laburo muy interesante en cuanto espacio, y a un lenguaje físico como principal motor de esta dramaturgia. Con muy pocas cosas, con recursos teatrales mínimos a nivel escenografía, vestuario y luces, pero que se disfruta de la actuación,  y el texto que acompaña mucho. También me agrado que esté tan cerca el público, me parece que le pone más tensión a la temática, y el espectador puede ser conmovido por dichas situaciones.

Destaco mucho la puesta en escena, en especial los efectos del tiempo climático, la lluvia correr por ese ventanal constantemente y los relámpagos con fugaces efectos en la iluminación, muy original.  

El teatro trata de hacer presente lo ausente, visible lo invisible, mediante este arte, acá es muy bien logrado; vuelven pensantes a los presentes y reflexionan sobre el pasado y que éste es un grotesco animal.