Y a otra cosa MARIPOSA

Y a otra cosaMARIPOSA

De Susana Torres Molina

HOY es el día

No te quedes enganchado en el pasado ni te pases los días pensando en el futuro.

Encontrá tu propia manera de ser feliz disfrutando cada momento.

“La vida es solo momentos que no vuelven a pasar, por eso, no pierdas tiempo, no los dejes escapar, la vida es solo momentos que se viven una vez, no dejes para mañana, no dejes para después”.

(Canción “VIVE LA VIDA” de AREA 305)

Comienza la historia mostrando a cuatro amigos del barrio, jugando y riéndose de sus pequeñas travesuras en la vereda.

Ellos son los “hombrecitos” que nos van a contar sus entretenidas aventuras, a través de la niñez de tan solo 10 añitos, pasando por la pubertad, adolescencia, adultez, vejez  y llegando a la ancianidad de 70 años.

De generación en generación y se fusionó en el imaginario social la idea de pureza, ingenuidad e inocencia. Valores que fueron tiñendo el sentimiento de estos adultos. 

Su título da muestra de un dicho lunfardo argentino, glosario que utilizó su autora Susana Torres Molina, en la obra. 

Una bellísima y tierna obra, lograda cuando hay equilibrio, ajuste, coherencia entre los elementos que la componen: con un alto contenido de positivismo, energía, frescura que dibuja y esparcen en todo momento la onda de esos años emblemáticos allá por 1960.

Cada detalle, el bar, la plaza, el bulín, un ambiente vintage sumado a un barrio bien porteño donde ocurren los hechos.

Una dramaturgia que genera agradables y emotivos momentos, el mundo imaginario o la realidad representada. Esto nos lleva a ser conscientes de que cada momento que estos personajes vivieron, lo disfrutaron sin pensar en los malos recuerdos del pasado ni pasando sus días proyectando un mañana incierto, solo se focalizan en el aquí y ahora.

Un trabajo increíble de su directora VIRGINIA LOMBARDO.

Pero esto no puede ser logrado si no se apoya en las maravillosas actuaciones de estas jóvenes chicas prometedoras de ser grandes actrices, FIORELLA CAMJI; ERICA HARDT; LUCÍA STEIMBERG y DANIELA PEÑA, ellas van mucho más lejos de la propuesta y eso es lo que me atrae, la idea del claro mensaje que nos dejan. Cuatro actrices, personificando a cuatro varones argentinos, mostrándonos las diferentes etapas de la vida humana: multigeneracional sus roles.

La idea de lo que se hereda puesto muy claramente en el final.

Una aventura muy bien lograda de estos amigos, por sus chispeantes caracterizaciones, bien distinguidos ellos, muy bien trabajado el texto, breve y concisa su historia en la cual cada uno llega a su momento de protagonismo, su momento estelar, que van contando encuentros y desencuentros, costumbres, dudas, errores, historias de amor, enredos y demás desventuras que posee la vida que va pasando.

Geniales las actrices, muy activas en la trama, ellas mismas van arreglando los diferentes escenarios, con una mínima escenografía, pero suficiente para darle a cada ambiente su profundidad; el cambio del vestuario también a la vista del espectador, acompañando por una música medular de la época. Contemplan los aspectos humorísticos todo el tiempo pero a su vez se ve una base dramática en cada papel, pero sin golpes bajos, sólo a modo de reflexión.

Felicitaciones a Tiziana Gongora, distinguido y selecto trabajo de vestuario, aggiorno el espectáculo.  

La interesante sensación de ver teatro y crecer en lo personal, esa misión sagrada la produce este espectáculo.