BIEN DE FAMILIA 

BIEN DE FAMILIA

De Diego Beares

El caso del reparto de una herencia, ya sea abultada o mezquina, suele ser motivo de lucha, a veces parricida, entre los herederos.

Él, Ella, Todos no se resistieron a la tentación. Una herencia millonaria por cobrar.

La familia Alcorta Alcántara son individuos devastados por las decisiones humanas.

Al vivir en la única sociedad que pudiéramos haber conocido, ¿Podríamos reconocer sus errores y escoger un camino de restauración?  

Un festejo, el cumpleaños, bastará que la luz se apague y poco puede imaginarse de lo que allí sucederá.

Para que el proceso de sus seres nos introduzca, capture y lleve por el derrotero de una noche intensa y descarrilada. Los pensamientos, miedos, ilusiones, miserias y ambición de todos son afectados por el tiempo, la costumbre, la infidelidad y el desgaste.

Esta fiesta se transformará en la mejor trampa de esta familia, compuesta por:

Lucía (Graciela Levaggi), viuda, preocupada por no perder el status social. Sus hijos Juana (Juana Conzi) una adolescente rebelde e irreverente, y su hermano mellizo Juan (Stefano Sanguinetti), estudioso, homosexual, sin secreto ante la familia, pero un inmaduro emocional busca una relación en la redes sociales.

Vera (Nara Ferragut), la hermana de Lucia, amante de Eduardo (el difunto) por muchos años, obvio excluida del círculo sanguíneo.

Por último Daniel (Leo Lugon), hijo extra matrimonial de Eduardo, marido de Lucia y padre de los mellizos.

Ansias de venganza en cada uno, todos sospechan de todos, todos se convierten en cómplices y responsables. 

Una dramaturgia audaz e inteligente muy digna de su autor y director DIEGO BEARES: ofrece momentos eróticos, tramposos, de sexo, pero en el juego del deseo. Las características esenciales de una obra modernista. Verdades de una suma agudeza y situaciones trascendentales resultan expresadas de un modo tan directo. Una mentira encarnada en la realidad, y es al mismo tiempo una mirada poética sobre el mundo que vivimos. 

Aunque en principio es un cóctel interesante, cada personaje es independiente del otro: están por aquí y por allá, y en pocos momentos todos juntos. Muchas historias que cargan con gran suspenso, con toques divertidos y que propone introspección.

Muy buenas actuaciones en general con profunda energía, comprometidas en la acción se sitúan en el confín de lo normal y lo patológico, lo manifiesto y lo oculto. Convincentes papeles, cómo el rol del novio de Juana, un personaje secundario pero que impresionó su despliegue, atrevido, irónico, perverso, creíble y muy divertido.  

Todo esto y mucho más, como la decadencia general de nuestras sociedades; el deterioro de la calidad de vida; la violencia urbana irracional; el desprecio por la propia vida y por ende por la ajena. Un desafío para el pensamiento. Somos un quejido insatisfecho y un ruido en el silencio.